Entonces la mujer de Lot miró atrás, a espaldas de él, y se volvió estatua de sal. Génesis 19:26.
Usted puede aprender de su pasado, pero no insista en vivir en él. Quien vive en el pasado, está condenado a vivir frustrado.
Cuando Lot y su mujer salieron de aquella llanura que sería destruida, lo hicieron en respuesta a un llamado de Dios.
El plan de Dios era que ellos llegaran a una ciudad segura llamada Zoar. Una vez estando en dicha ciudad (que significa ¨pequeña¨), el fuego consumiría todo a su paso.
Parece que esa nueva estación, que por cierto era segura, no fue suficiente para la mujer de Lot, pues desde Zoar miró hacia atrás y fue así como terminó convirtiendose en estatua de sal.
Amado lector, esa inclinación a añorar experiencias de su pasado sin Cristo en su vida, pueden jugarle una mala pasada.
Satanás buscará captar su atención de nuevo para desenfocarlo de su objetivo y sacarlo del camino correcto.
Mi consejo es que voltee la página. Seguramente usted ha leido un libro de dificil comprensión.
Lo frustrante de leer un libro así, es que, quiera o no, usted deberá dar marcha atrás para comprender lo que el autor quiere decir.
Usted avanza una página, pero retrocede dos. Eso es frustrante. Algunos expertos dicen que lo mejor que puede hacer en esos casos, es voltear la página antes de que pierda total interés por el resto del contenido.
Cavar y cavar, puede resultar nocivo. Es por eso que usted debe contemplar simplemente, seguir adelante.
El Espíritu Santo le ayudará a desconectar sus sentidos de aquellas experiencias del pasado que aún persisten en su interior.
Sea honesto con usted mismo y con Dios. Hablele de aquellos recuerdos que lo mantienen atado al pasado. Le aseguro que su fuego santo arrasará con ellos, de la misma manera como lo hizo con Sodoma y Gomorra.
Voltee la página. La historia continúa, su nueva vida en Cristo, también debe continuar.
Paz y mucho bien.