¡Pelear!

Escrito el 25/07/2018
Ps. Gustavo Muñoz


Forjad espadas de vuestros azadones, lanzas de vuestras hoces; diga el débil: Fuerte soyJoel 3:10.

Usted debe esforzarse, nada alcanzará sin esfuerzo, nada logrará sin antes dar la pelea.

En tiempos de debilidad, la batalla no cesará; pero lo que usted deberá hacer es pelear contra sus oponentes.

Amado lector, aunque atraviese momentos de profunda y frustrante debilidad, Dios espera que usted se llene de fuerzas para continuar.

No desmaye, no se retire sin tener la seguridad de haberlo entregado todo. ¿Por qué renunciar a su sueño? ¿Por qué dejar tirado lo que con tanto esfuerzo ha logrado construir?

Amado hermano, la perseverancia siempre traerá una recompensa. Esfuércese. Póngale la cara a las circunstancias.   

Los débiles y los cobardes no serán recordados, pero de los valientes hay memorias. No pasan a la historia sin la marca de la honra y el respeto.

Sea entonces una persona valiente. Siga, continúe; no tema a las circunstancias, confíe en Dios y entregue lo mejor de usted.

Es probable que usted no cuente con las armas apropiadas para luchar, pero lo que Dios espera de usted, es que use lo que está en su mano.

Convierta un azadón en una espada. Use lo que está en su mano, de la victoria se encargará Dios.

Pero por favor, hágase consciente de esto: Dios no hará por usted, lo que usted deberá hacer con sus manos.

Batalle, luche, Dios estará de su lado. Desarrollo un corazón valiente, fuerte. La valentía no es una capacidad con la que nacemos, es una capacidad que desarrollamos a través de las circunstancias.

Son las situaciones difíciles las que cooperarán para que usted se convierta en una persona valiente. Por eso, no tema al tramo por el que está pasando, si Dios está con usted, Él lo preservará, no perecerá.

Amado cristiano, no vida como una víctima, esfuércese por ser el protagonista de su propia historia. Usted no está solo, convénzase de que usted tiene de su lado a un Dios victorioso.

¡Bendiciones!