Entonces los sacerdotes tocaron las trompetas, y la gente gritó a voz en cuello, ante lo cual las murallas de Jericó se derrumbaron. El pueblo avanzó, sin ceder ni un centímetro, y tomó la ciudad. Josué 16:20
Rodear un muro; bañarse 7 veces en el Jordán; mezclar saliva y barro para sanar a un ciego, ¿no le parecen métodos extraños?
Así es Dios. A veces su obrar poco se entiende. No es que quiera confundirlo, lo que ocurre es que sus métodos responden a su gloriosa capacidad creativa.
Saber esto, debe liberarlo de sus acartonadas formas de caminar con Dios. Nuestro Dios le asegura un destino de bendición, pero la fuente de sus bendiciones son impredecibles.
Así como Elías fue alimentado por cuervos, de la misma manera Dios lo alimentará a usted. Si, a través de un cuervo, o de cualquier otra ruta que el Señor considere valida.
Tenga fe. Confíe en los métodos poco usuales de Dios. Descanse en Dios y vea como Él opera de manera extraordinaria.
¿Usted ha sido testigo del llanto de un bebe cuando se obsesiona por algo? Seguro que sí.
Pues bien, a veces somos como niños encaprichados. Nos convencemos de que debe ser de una forma y solo de esa forma debe ocurrir.
Con Dios no funcionan los caprichos, funciona la fe. Con Dios no funcionan las rabietas, funciona la paciencia.
Amado lector, sepa que su promesa se cumplirá a su debido tiempo, pero quiero anticiparle algo, se cumplirá de la manera como corresponda a la soberanía de Dios y no de acuerdo a sus exigencias.
Despójese de la ansiedad y no atente contra su propio bienestar. Abraham y Sara usaron su propio método para hacer efectiva la promesa, se adelantaron y el resultado fue fatal.
Lo métodos de Dios son poco usuales, pero son efectivos y seguros, en realidad funcionan. Esperar, perdonar, ofrendar, obedecer, servir, etc., son parte de esa larga lista.
¡Pero Señor! -Dirá usted con angustia- Necesito esto o aquello y tu respuesta es que ¿espere, perdone, ofrende, obedezca y sirva? Sí, definitivamente sí. Haga lo simple, Dios hará lo complejo.
Bendecido día.